Lucía de arena, de Martha Quiles

Al principio, la candidez adolescente es quien desafía y somete al saludable sueño de ser mayor.
Para ello, sólo le basta contemplar su íntegro florecer.
A poco de andar, la realidad, la hará rendirse.

Gaviotas, de Boris Elkin

Cuando la honestidad de la conciencia y el contacto con hombres dignos y paisajes campestres
se unen para moldear un espíritu asociado, entrañablemente, al arado, al perfume de la tierra fresca y al umbral del cielo, surgen bellas y tiernas inspiraciones como la siguiente

Reír llorando – Juan de Dios Peza

“Ciertas veces, como en una comedia, la vida fuerza a interpretar la burla sutil de un disfraz, con maquillaje sonriente, para encubrir la angustia y la desdicha del ser sollozante y apenado que lo porta”. “Sejo” Sosa.

Soledad Montoyera – Marcelino Román

No importa el cómo, el dónde, ni el por qué. Pero, sabemos que el desamparo y las ausencias, con su epílogo, la angustiante soledad, suelen trazarnos un sombrío horizonte, que borra toda esperanza de alcanzar los encantos de la fraternidad, así como los de la entrecasa y sus misterios.
Y, lo peor, es que, es muy difícil, desterrar el rumbo de ese desconsuelo.

Que yo no lo vea – Jorge Vocos Lezcano

“¿Cuál es la frontera entre ese entorno urbanístico que resplandece con impaciente ansiedad, bien que, despojado de siestas y silencios, y el solícito reposo pueblerino, siempre en gracia con el sosiego y la mesura?” “Sejo Sosa”

El Manzano y el Limay

El Manzano y el Limay, poema de Raúl Ferragut. Sobre el autor Es periodista agropecuario y comunicador social de la región del Alto Valle del Río Negro, que eligió especializarse en el ámbito rural tal vez porque su abuelo fuera chacarero en el mismo valle y fruticultor de manzanas. Pero además lo acompaña el don […]